The Strongest (2) vs. Nacional Potosí (3)
Anoche hubo un temblor, y no me refiero al que sacudió la Sede de gobierno esta madrugada (qué miedo), sino al tremendo sacudón que nos dio Nacional Potosí en nuestro propio estadio.

Aún hay gente que habla y comenta sorprendida por el resultado de ayer, pero no hay nada sorprendente en nada de lo que ocurrió ayer, pues que Nacional Potosí nos haya destrozado no fue cosa de la casualidad o de algún hecho desafortunado. Veamos.

Nacional Potosí siempre fue un equipo correoso como poco, pero este año está teniendo, creo, la mejor temporada de su historia. En 9 partidos que lleva jugando, no ha perdido ninguno, si bien es verdad que la mitad de esos partidos quedaron en empates, llevaban marcados 17 goles (ahora 20), siendo de los equipos más goleadores del torneo, y sólo les habían marcado 5, es decir que meten una media de dos goles por partido y les anotan un gol cada dos partidos.

Para mí la sorpresa era que un equipo con una delantera letal y una defensa sólida, a los 7 minutos del encuentro ya fuera perdiendo por 2 a 0. Parecía que iba a ser una goleada atigrada incluso por la fuerza con la que The Strongest empezó el encuentro.

Hasta ese momento la realidad en nuestra cabeza coincidía con lo que pasaba en ese terreno de juego. Para la mayoría de la hinchada, lo de Nacional es un golpe de suerte (de ahí que estén punteros invictos según algunos). El Tigre es un equipo de jerarquía mucho mayor y no iba a costarle nada bajar de la nube a los Rancho Guitarras. Jugábamos en el invicto Siles, donde a rivales de más peso (en teoría), habíamos derrotado sin problemas, y encima de todo, veníamos de sacar dos resultados fantásticos en nuestros partidos de Oruro y Cochabamba con un juego que evidentemente iba al alza.

Y cómo no creer que nuestro juego iba en alza si comenzamos ganando y jugando bonito?
Pero ahí es donde empieza a mostrarse la realidad en toda su crudeza. Nacional Potosí demostró ser un equipo mejor armado, con un DT (no es mi pariente) como es el ex jugador atigrado Alberto Illanes, que en todo momento supo qué hacer, y con jugadores que demostraron una fortaleza física y psicológica muy superior a la nuestra.

Jugando de visitantes, con dos goles por debajo en el marcador y con un Tigre que estaba demostrando un buen juego repito, los potosinos no se amilanaron, y siguieron su estrategia, que al principio no les salió, pero con la cuál rápidamente lograron acortar distancias.

Lo que si me parece increíble es la manera como anularon nuestro medio campo. El que los jugadores de Nacional hayan logrado anular completamente a Castro, Veizaga, Ramiro y Marvin es digno de admirar, porque ni equipos del exterior, con miles y miles de millones de presupuesto habían logrado tal “hazaña”. Para mí esto convierte a Alberto Illanes en un genio de la estrategia. Pero eso, y tener un equipo equilibrado no convierte a Nacional en una superpotencia futbolística, no señor.

Anoche caímos contra el mejor equipo del torneo, eso sí, pero en gran parte eso fue provocado por errores propios como siempre.

Para empezar, Blackburn y sobre todo Reinoso, a pesar de los dos buenos goles que marcaron, fueron un desastre total. Entre los dos arruinaron todas y cada una de las pocas situaciones que tuvo el Tigre, especialmente después del ingreso de Henry Vaca, que nos dio un poco de respiro de la asfixiante presión a las que nos tenía sometidos Nacional.

La defensa otra vez un desastre total, Ortiz y Valverde tuvieron más trabajo que nunca, pero nunca demostraron que se puede confiar en ellos; pero aunque ellos no aportan nada, al menos no restan como el pobre Cuchito Vargas. Le digo “pobre”, porque Cuchito está siendo el gran perdedor de todo esto. Vargas es el sacrificado en un puesto en el que no sabe jugar.

Si de delantero no daba una, de defensa juega grandes partidos a favor del rival. Pierde balones, pierde marcas; y lo peor es que a medida que va cometiendo errores se pone más nervioso y empeora las cosas. Es triste porque Cuchito tenía gran proyección como delantero y además es de los pocos que sienten verdaderamente la camiseta , y le pone unas ganas inmensas. Pero en el fútbol profesional eso vale poco.

Todo el peso de la defensa recayó sobre Marvin que obviamente no puede estar en todos lados y que anoche literalmente se partió la cara por el equipo, y sobre Dani Vaca que no pudo hacer nada en ninguno de los goles, pero que nos salvó de una goleada que si hubiera sido escandalosa al extremo, aunque otra vez lo volvieron a colgar, aunque esta vez el disparo fue al travesaño.

Para rematar, Pablito vuelve a fallar en sus decisiones. Evidentemente en teoría tienen sentido, como lo demostró con el ingreso de Henry para darle poder ofensivo al Tigre a pesar de que los Potosinos nos estaban destrozando en defensa. Gracias a Henry, el Tigre pudo adelantarse y bajar la presión sobre la defensa, pero la banda del Cuchito era un coladero.

Después quiso hacer lo mismo con el ingreso de Gómez por el quemado Vargas, pero ya era tarde. Lo que si no entendí, es por qué quitar a Ramiro para que entre Alencastro.

Alencastro y Cure son jugadores que también ponen empeño, pero realmente no sé por qué se los contrató. Son jugadores con un nivel técnico muy bajo, jugadores de segunda división o menos. Jugadores que Pablo tiene metidos en el equipo y que no le queda más remedio que usar; y si mis sospechas son ciertas, tal vez incluso esté obligado a usarlos, porque para que estén ellos ahí ocupando un espacio en una cancha tan importante en un equipo tan grande como el Tigre y rindiendo muy por debajo del nivel requerido, sería mucho mejor gastar esas ‘balas’ en jugadores juveniles formados por el propio Club. Definitivamente nos saldría más barato y a la larga muchísimo más rentable invertir ese tiempo y ese espacio en jugadores jóvenes nacionales que estoy seguro que tienen mejor técnica, y las mismas ganas que estos chicos que han traído del extranjero; aparentemente negocios de algún dirigente que está desesperado por recupera su inversión a costa del equipo.

No puede ser que equipos como Blooming (que se pasan meses sin cobrar sueldos), Wilstermann, e incluso este Nacional Potosí tengan mejor ojo para buscar en el extranjero y tengan en sus filas jugadores de mayor jerarquía que nuestros extranjeros, y que seguramente deben ganar mucho menos; porque esos equipos difícilmente pueden competir con el poder financiero de The Strongest como Club (en teoría también, quién sabe).

Así que de sorpresa el resultado de anoche, poca, a no ser que sea por el estado en el que estamos viendo que las malas decisiones dirigenciales están dejando al que alguna vez fue uno de los mejores equipos del continente.

¿Y quién resulta ser el más perjudicado, después del Club evidentemente? Pablito está siendo quemado y estos dirigentes no dudarán en cortarle la cabeza para excusarse, aunque todos sepamos que es culpa de ellos, culpa de sus ahijados y culpa del abandono del Club la situación que vivimos actualmente. Si a Pablo lo dejaran trabajar como sabe, si no tuviera jugadores impuestos en el equipo, seguro que la historia sería otra y mejor.

No digo que Pablo sea perfecto. Obviamente que se equivocaría, y gravemente al principio, porque nadie nace sabiendo, pero un partido muy malo frente a un gran rival, no puede borrar el hecho de que Pablo está mejorando y que su estrategia funciona, su proyecto es viable y su falta de experiencia es algo que se puede solucionar muy rápidamente bajo buenas condiciones, pero no podemos exigirle que sea un mago y que solucione todos los problemas del Club ganando partidos, y que no se equivoque nunca. Ni siquiera un DT con 20 años de experiencia y que haya dirigido equipos de Europa y Selecciones Nacionales podría solucionar los problemas graves de fondo que tiene el Tigre. Por eso no podemos estrellar nuestra frustración en él que hace lo que puede con lo que tiene.

Y parte de la hinchada está poniendo su grano de arena en que la cosa no funcione al no ser un poco más realista, al no darse cuenta que no tenemos equipo ahora y hacemos lo que podemos, al creer que sólo con vestir de amarillo y negro, un jugador será mejor que otro que esté vestido con una copia de la camiseta de River o de Vélez.

Señores, estamos en problemas, ya sabemos eso, pero gritar, patalear y pedir cabezas de nuestros ídolos como Daniel o Pablo, o silbar a jugadores como el Cucho Vargas que aunque sean muy malos y se lo merezcan, no ayuda en nada, más bien al contrario. Lo que tenemos que hacer ahora que estamos metidos en el problema, es apoyar al equipo, porque esta situación no va a mejor por arte de magia o porque de pronto traigan un DT con pociones mágicas.

Hemos tenido peores años, pero la hinchada del Tigre siempre se ha caracterizado por apoyar hasta en el momento más angustiante y más desesperante. Sigamos así.

Ahora no nos queda más que seguir apoyando al equipo. Que Pablo se dé cuenta que su carrera corre un riesgo grave, y que deje de usar jugadores que aunque sean sus amigos o su ‘familia’, lo están perjudicando a él y están perjudicando al equipo. Que no se deje presionar por los padrinos de sus jugadores extranjeros que ya han demostrado de sobra que no sirven.

Que no tema dejar fuera de las convocatorias a los Alencastro, Cure, Jara y demás ‘joyitas’ que nos mandan de fuera. Que no tema armar un equipo con la base que tenemos y tapar los huecos con los juveniles que han sido promocionados; que a la larga resultará el equipo que necesitamos. Que se ponga el sobre todo y sobre todos, porque eso nos beneficiará más que quedar bien con la dirigencia o con sus excompañeros.

Vamos Pablo, Vamos Tigre, Vamos hinchada!!!

El Tigre cae... pudo ser por goleada

“El Tigre está sintiendo el trajín por la seguidilla”

Nacional Potosí derriba al Tigre y es líder e invicto del Apertura

Temblor en Miraflores…!, cuanto todos pensábamos que nuestra racha ganadora como locales, iba a dar fin con el invicto de líder del certamen; caímos en nuestro propio territorio, produciendo un verdadero remezón entre los atigrados.

Cerca a 10.000 espectadores en el Hernando Siles de Miraflores, en una noche bastante fría que nos recuerda que estamos por recibir al impávido otoño.

Se cumplían 6 minutos de juego, y ya ganábamos por 2 goles contra 0; haciéndonos creer que se venía una humillante derrota para el equipo Rancho guitarra…

15 minutos del partido, y los de la banda roja nos empatan demostrándonos por qué el cuadro “Rancho Guitarra” es el único líder e invicto del Torneo Apertura que se está jugando; con mucha solvencia, serenidad, pero sobre todo, un gran despliegue físico de los potosinos, que terminaron el encuentro fresquitos como una lechuga.

Y si la diferencia no fue mayor, la explicación está en las buenas intervenciones de Daniel Vaca quien por lo menos en 3 oportunidades nos salvó de inminentes caídas, algo que hubiese producido una verdadera hecatombe en nuestra institución.

Recordemos que no es la primera vez que Nacional Potosí nos gana en casa, pues hace menos de un año (30 de marzo 2018), en pleno estadio Rafael Mendoza Castellón, y con César Farías como nuestro DT; el cuadro rancho guitarra nos vence por 1 a 0 con gol del ex atigrado Harold Reina; haciendo cumplir a raja tabla aquella “Ley del ex”, la misma que ayer Harold volvió a aplicarla anoche para pesar nuestro..

Final del encuentro, y alguna gente desubicada, profieren gritos en contra de nuestro emblema Pablo Escobar; olvidando todo lo que él dio por nuestra institución; que apenas tuvo 2 semanas de pre temporada; que a los “refuerzos” que contrataron ni los conocía, y que tuvo que dar pie a su llegada ante una falta total de alternativas que debería dar el directorio.

El próximo miércoles jugamos contra Guabirá de Montero en el Hernando Siles; partido que fue reprogramado por nuestra intervención en la Copa Libertadores de América; una gran oportunidad para volver a levantar cabeza; esperando que nuestros lesionados se recuperen, y puedan ser fresco aporte para nuestro plantel.

VAMOS TIGRE!, LEVANTA TU CORAZÓN!

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Seguramente usted recuerda los partidos que jugaba en el patio de colegio en especial cuando usted estaba en el ciclo básico o en primaria. Lo más probable que haya sucedido es que casi todos sus amigos (posiblemente usted mismo) se haya posicionado lo más cerca del área rival posible mientras su portero o sus pocos defensas lanzaban balones aéreos sin un destinatario concreto. También es probable que su equipo haya estado partido, sin comunicación entre líneas, porque el objetivo era divertirse.

Lamentablemente, esto es futbol profesional. Nuestros jugadores cobran miles de dólares para exigirse a sí mismos rendir al tope de sus posibilidades, pero lo de ayer era muy parecido a un partido en el patio de un colegio, y, por más apoyo que el equipo reciba, el aliento no puede disfrazar las tremendas falencias de planificación y de ejecución de un plantel que fracasó en Copa Libertadores y ayer se dejó ganar en fútbol, planteo, efectividad y testosterona.

El aliento no oculta el hecho de que Valverde no ganó ni un balón aéreo de importancia. De hecho, perdió casi todos los balones en los córners en contra; el aliento no tapa que Ortiz es el único que habla en la defensa y prácticamente en todo el equipo que sufre del síndrome Wayar: jugar sin hablar, cabizbajos, poca pierna fuerte y visión lateralizante de los pases, en una suerte de transformación fantasmagórica: el lateral juega de volante, el wing de defensor y la ofensiva consiste en correr rápido hacia el arco. El aliento no disimula que Vargas es un atacante por afuera y que no aprenderá a jugar de lateral ni en 10 años continuos porque su aporte es tocar hacia el medio de la defensa, correr y levantar centro. Hasta él mismo debe aburrirse de las tareas que le han dado para realizar. El aliento no tapa el hecho de que tenemos un exceso de jugadores extranjeros en ofensiva (Vaca es suplente) que han demostrado que pueden correr rápidamente y que les quedan bien los botines brillantes. Ni Alencastro, ni Cure, ni Reynoso ni Blackburn están a la altura de Reina, que viene en forma y es ambicioso.

El aliento no puede apartar del análisis el hecho de que Escobar ha escogido ayudantes de campo muy poco capacitados para realizar su labor o que por lo menos no han demostrado el porqué de su lugar en el club. Su incompetencia empezó a mostrarse en el partido de ida contra Libertad (confirmada en el de vuelta) y ellos, sumados a los jugadores de origen extranjero (alrededor de 9 en total) provocan una pregunta importante: ¿Son realmente mejores que los bolivianos?

De todas formas los jugadores no están solos en la debacle. Están acompañados por un presidente del que se sabe que existe porque emite algún tuit muy de vez en cuando y al cual se debe endilgarle la contratación de Machado, el zaguero presentado como mundialista, de pésima participación en Libertadores y de nulo aporte en la Liga. A su vez, el presidente está orientado por dirigentes con un capital intelectual pobrísimo, que regalaron un campeonato al darle la conducción de nuestro equipo a Daniel Farías, que se deshicieron de un campeón de América como Ischia, que permitieron la dualidad de funciones de César Farías y que trajeron a estrellas como Novoa e Ibarguen.

Existe, a pesar de todo aquello, una buena noticia. No jugó Jara. Aunque, si el Tigre hubiese mantenido o ampliado la ventaja de dos goles, era muy posible su presencia. Por ahora Escobar ha encajado dos goleadas y ha perdido de local habiendo estado ganando por dos goles diferencia. No son números alentadores.

(Partido reprogramado)

v..........vs.........s.
... THE STRONGEST............................GUABIRÁ.........