introducción: illanes no mueve el dibujo y cambia solo a jugadores por quinta amarilla. demiquel y valverde son, esta vez, los centrales; torres y marvin, los laterales; veizaga y castro al medio; áñez por derecha en una nueva posición, barbosa de enganche, ramiro vaca por izquierda; con reinoso de punta. oriente se mete atrás con dos líneas de cuatro, un enganche y un delantero. el homenaje al "gladiador" veizaga -por sus 300 partidos- marca el preámbulo del partido. el nuevo técnico de bolívar, natxo rodríguez, observa la primera parte en la bandeja baja de preferencia.

nudo: oriente -alentado por una barra de una docena de hinchas en la curva norte- juega diez minutos, perdona dos chances de gol y luego desaparece de manera misteriosa. el tigre arranca bajo mínimos pero dos pelotas paradas -pésimamente defendidas- ponen rápidamente un 2-0 tranquilizador (tantos de áñez y barbosa). en la tercera bola colgada al área llega el 3-0 con doblete del brasileño. las cámaras del stadium marcan mucho mejor que los de oriente y se dedican a señalar a las parejas que ven juntas el "match".

desenlace: el "flaco" aprovecha para dar respiro a los centrales y coloca a marteli para hacer pareja con "maxi". el "toro" blackburn sustituye a castro y se coloca de enganche, retrasando a barbosa para hacer pareja con veizaga en el "cinco" mixto. illanes ha decidido apostar a la ambivalencia de sus jugadores.

el partido es un espectáculo de taquitos, desbordes por los costados, asociaciones, paredes y remates a placer. "platiní" sánchez no puede creer lo que ve: jamás oriente petrolero "jugó" con tanta displicencia en la paz. el hecho que no haya descensos ha sido una medida pésima para la competitividad del torneo. "montero, marca, carajo" grita desperado el dt verdolaga. en el minuto de hidratación, el "pícaro" castillo se enoja con todos sus compañeros.

áñez marca su doblete -ver para creer-, reinoso dice presente en el "score" y campos marca a la salida de un corner en la primera pelota que toca tras entrar por el propio áñez. barbosa es despedido como héroe y el siete a cero sube a la pantalla del "siles" con otro gol de jhasmani.

post-scriptum: mañana martes juegan los que persiguen al tigre. ni bolívar, ni royal pari, ni always ready pueden permitirse un empate o una derrota. la recta final de infarto recién comienza. la nochebuena y la nochevieja esperan para pintarse -otra vez- de amarillo y negro.

Y es que al parecer, la plantilla del crédito cruceño actual dista bastante de la templanza y calidad de los Saldías, Melgares, Coímbras o Garcías que en su momento derrotaron a Boca Juniors por Copa Libertadores o vencieron a Bolívar en sendas finales. Salvando las distancias, lo mismo ocurre con el Parma o Fiorentina italianos actuales en comparación con sus versiones de los años 90, con el Milán actual versus el 2007, con la Lazio de ahora mismo contra aquella de principios de siglo (Marcelo Salas, Juan Verón y Pavel Nedved, por ejemplo), incluyendo a equipos ingleses que no encuentran el rumbo hace por lo menos un lustro como el Manchester United (a excepción del periodo de Mourinho) y ahora mismo el Arsenal, y ni hablar de ex campeones de Europa como Aston Villa o Nottingham Forrest, muy venidos a menos en los tiempos actuales.

Es posible que casi como toda crisis deportiva de alta intensidad, la labor de los dirigentes sea la culpable. Poca o casi nula inversión en juveniles, llegada masiva de extranjeros que aportan poco, entrenadores caros de cuasi nula trayectoria, políticas pobres de expansión de activos o de socios y pésimas decisiones con respecto a la gestión de su primer equipo podrían explicar hasta cierto punto que Oriente no esté a la altura hace algunos meses (por lo menos en este campeonato) de su historia o intereses. Pero quizá ya es tiempo de hablar de dos elementos dirigenciales también: ambición y preparación.

Si bien está claro que como cualquier equipo grande, puede recuperarse en el siguiente campeonato y ser protagonista o incluso campeón, es posible que su aprieto dure años si no se toma decisiones importantes para mantenerse competitivo a largo plazo (Parma ya no se lleva jugadores sudamericanos con la frecuencia que seguramente quisiera y mucho menos de altísima calidad mundial como fue en su momento el caso de Asprilla o Hernán Crespo; Fiorentina, desde la venta de Batistuta a la Roma, no volvió a contar con un goleador de jerarquía mundial y el Milán, si no fuera por Ibrahimovic, estaría en un pozo deportivo – como lo ha estado – del cual le llevaría varios años salir; un “Rossoneri” que en su momento tuvo de enganche a Kaká y de centro delantero a Shevchenko), decisiones como aumentar el talento de su propia plantilla tanto deportiva como en los escritorios, decisiones que impliquen ser competitivo a nivel internacional.